Son ya decenas de reparaciones exitosas de estos aparatos, que no tienen un coste elevado, pero que no tienen por qué desecharse por un simple componente que vale unos céntimos.
Las habilidades y herramientas necesarias para repararlos no son muchas. Es importante saber detectar el componente defectuoso y dónde conseguir el repuesto. En el fablab disponemos de repuestos típicos de muchos aparatos, es una inversión pequeña que nos da alegrías cotidianas.
Os animamos reparar vuestros aparatos y haceros un triple favor: a vuestro bolsillo, a vuestro planeta y a vuestra cabeza.
Si tienes cualquier duda puedes escribirme a: anto@unex.es o, mejor aún, unirte a nuestra comunidad de curiosos y creativos por un mundo mejor 😉